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Los mejores atletas, en el asador. /Juan
Marín. |
Los
principales participantes de la Media Maratón
de La Rioja recuperaron fuerzas con los chuletones
del Asador Egüés
Es
una visita obligada. Tan habitual como que el
último fin de semana de mayo, el atletismo
tome las calles de la capital riojana es que
los participantes más destacados de la
Media Maratón de La Rioja recuperen fuerzas
‘devorando’ los chuletones que les
ofrece Fermín Lasa en el Asador Egüés
de Logroño.
Este navarro afincado en La Rioja invita a los
mejores atletas y a los miembros de la organización
a la carne a la brasa que ha dado fama a su
restaurante. Es el momento en el que todo el
mundo se relaja. Los organizadores olvidan la
tensión de los últimos días,
los preparativos del último momento y
las prisas.
Los
atletas después de correr, olvidan su
rivalidad y charlan animadamente comentando
sus próximas citas: campeonatos continentales,
citas internacionales o nuevas pruebas del calendario
español...
Porque
ese es el momento no sólo de hablar del
pasado sino también del futuro tanto
para la organización como para los atletas.
La carrera del próximo año, si
las previsiones municipales se cumplen, deberá
abandonar el recorrido que se ha hecho tradicional
en los últimos años, porque la
intersección de las calles Duques de
Nájera, Carmen Medrano y Avenida de Burgos
estará en obras.
En cualquier caso, todos se levantaron de la
mesa con la promesa de volver el año
próximo, al menos, a comerse unos chuletones
al Restaurante Egüés que dirige
Fermín Lasa.
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